miércoles, 18 de enero de 2012

Aliados


"No somos asesinos". Eso decía el mensaje que había recibido por parte de mis más recientes aliados. Y lo que es peor, lo sabía, pero Luka me había vuelto loco los últimos días con su idea de que iban a matar a Stonehouse para que nosotros tomemos control de sus tierras ya y ellos obtengan su ansiada libertad. Y que eso me iba a poner en aprietos con Mildred porque ella iba a saber que yo tuve la culpa. Ay Luka, deberías calmar un poco tu ímpetu, nos vas a enloquecer a todos.
Por suerte las cosas marchaban como a mi me gustan: bien, con firmeza y hacia el frente. Los proyectos estaban empezando a dar frutos, Allister se había revelado como un excelente administrador -no tenía el ojo financiero de Mildred, pero no era nada despreciable-, y había conseguido unir a la red de información que tanto me estaba preocupando. Tenía finalmente tiempo para dedicarme a trabajar en Trono y avanzar con los muchos proyectos. Fue un tiempo de ardua labor: Luka planificando edificios, Shiera reclutando un cuerpo docente, Richard entrenando las levas de ciudadanos y poniendo a punto a la guarnición de Randolf y a los guardias especiales... Al que veía algo distante era a Frank. Espero que mis palabras le hayan servido de algo, me parece alguien que merece recuperar la vida que perdió, porque lo único que hace es huir de ella. Tomar un nuevo escudero y su "relación" con Selina pueden ser los alicientes que necesita.
Como decía, estoy contento. Mi hijo es hermoso y sano. Su madre se babea cada vez que lo ve reir. Las nenas lo adoran. Y yo estoy orgulloso de él. Espero que cuando le toque reemplazarme pueda mantener mi línea y seguir elevando el nivel de nuestra Casa.
Elevar el nivel de nuestra casa, ese es el objetivo. Ahora que este terminada la escuela pública, podremos generar gente culta que eleve la calidad, aparte de gente capacitada con oficios. Eso es lo que pretendo ofrecerle a los Stark si alguna vez tenemos que ir a la guerra: lo que siempre hizo nuestra casa históricamente, ser sus ingenieros y apoyo. Los baños públicos, la plaza de armas y la armería están casi listas, la ciudad tiene las defensas necesarias si algún día a un loco como Duncan (o a las siete plagas del Muro que parecen estar fijas con nosotros) nos persiguen. Tengo varias ideas para empezar a ejecutar, pero prefiero terminar Altar y organizar un ejército regular para defender nuestras tierras, con soldados profesionales. No necesitamos tanto más me dijo Richard, y creo que tiene razón. Necesitaríamos dos o tres infanterías, una caballería y barcos de guerra para sostener las rutas comerciales. He recibido propuestas comerciales de los Mormont y de la Casa Manderly para negociar con ellos, y si voy a decirles que sí, necesito algunos barcos para proteger mis costas.
Estuve pensando también en arrancar los caminos que unen mis tierras con la casa Stonehouse, sería otro gesto para mis recientes aliados. Y para mis viejos aliados. Aparte tendríamos salida rápida a Altar, qué donde va a estar estacionado el grueso de mis tropas. Los caminos que nos unen al Camino Real y a Bosquespeso están en marcha y van bastante bien. Un tercer camino haría que toda mi tierra tuviera vías rápidas de movimiento.
Últimamente estuve pensando bastante en La Sombra. Siento que esa mujer en parte es como yo, busca lo mismo y no va a dudar en usar todo su repertorio para conseguirlo. Tendré que manejarme con cuidado, ya que si son como yo, usaran todo recurso valido para cuidar a los suyos.
Por otro lado, es bueno volver a ver a todos. Siento que se está armando algo maravilloso para Poniente, el principio de un cambio que servirá para que el Norte principalmente, y luego espero que el resto del continente también, mejore en su calidad de vida, para no vivir atormentados por largos inviernos, por bandidos o por necesidades. Mi sueño es dejar un legado como lo hicieron Aegon o Brandon el Constructor. Y para eso los necesito a todos. Trabajando. Igualmente, sé que mis enemigos complotan a mis espaldas, esperando el momento. Y para ellos también tengo que estar listo. Necesito ser más fuerte que nunca. Como dice el viejo dicho de los Braavosi: "El hombre que teme la derrota ya ha sido derrotado. El miedo hiere más que las espadas."

No hay comentarios:

Publicar un comentario